¿Podríamos transformar estas micro-adicciones en favor de nuestro desarrollo personal? Aquí van unos consejos para allanar el camino:
1. Desconecta. La parte más difícil de cambiar hábitos es que son realmente patrones de conducta conocidos. Es fácil seguir haciendo las cosas como sabemos hacerlas. Incluso aunque no nos hagan especialmente felices. Cambiar tu vida no te llevará un solo día, así que tómatelo con calma y comienza a cambiar un hábito HOY.
2. Hazlo lo mejor que puedas. Date cuenta de que tu nivel más alto de rendimiento varía según el momento o la energía que tengas. Pero cualquier cosa que estés haciendo, hazla lo mejor posible. Esto hará que te deshagas del papel de víctima y que no te refugies en la autocompasión.
3. Construye grandes momentos. Habréis oído muchas veces la frase de “Piensa en grande y actúa en pequeño”. Es importante enfocarnos en la visión final deseada pero si queremos construir desde el ahora, necesitamos pensar en pequeño y actuar a lo grande.
4. Modifica tu entorno. La forma más fácil de conseguir crear un nuevo hábito es prepararte para poder hacerlo, cambiar tu entorno para reforzar su consecución. Saca tu bici a un sitio visible y fácil para comenzar a andar, prepara un espacio especial para meditar, cómprate el bañador de natación…etc.
5. Haz solo una cosa a la vez. Mucha gente pretende cambiar su dieta, comenzar a hacer deporte, cambiar su vida social, comenzar una carrera, etc.. poniendo su energía en varias direcciones a la vez. Es como querer probar muchos olores al mismo tiempo, acabas sin poder distinguir ni oler ninguno de ellos… Enfócate en dominar un hábito primero y luego sigue con otro.
6. Se persistente. El progreso se consigue fallando y volviendo a empezar. Y la única cosa que se interpone entre tu y dónde quieres estar mañana es la perseverancia.
7. No seas perfeccionista. No temas la imperfección. Sino nunca intentarías nada ya que cualquier cosa nueva, al principio, la haremos con más imperfección que cuando la dominemos más.
8. Piensa menos. Y actúa más... ¿Cuánto tiempo gastamos en sospechar como será realmente lo que queremos que sea en vez de hacerlo de una vez? ¿No sería más lógico y productivo invertir esas energías en comenzar aquello que deseamos?
El éxito al final es cuestión de permanecer en lo que otros han abandonado; William Feather.
2 comentarios:
Hola, muy interesante post y muy interesante blog.
Añadiría un noveno punto: "Ve paso a paso", lo cual no necesariamente supone ir lento.
Y es que a veces nos bloqueamos con la magnitud de un cambio, cuando en realidad un gran cambio es la sucesión de pequeños cambios.
Y predicando con mi ejemplo, he retomado el hábito de nadar, y noto que me refuerza más el hábito nadar 2 series de 500m que 1000 seguidos, y que las veces que he nadado 1000, al día siguiente me costaba más.
Un saludo, y enhorabuena por el blog,
Javier
Gracias María.Y la puntilla es se persistente. Cualquier excusa es buena para dejar de ser constante.
Meli
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